Los repelentes de mosquitos para uso en humanos (o uso personal) son productos que se aplican sobre las diversas zonas de la piel expuesta con el fin de protegerla contra las picaduras de los insectos.
¿Cuál es la importancia de usar repelentes para insectos?
Este tipo de productos forma parte del conjunto de medidas que deben tomarse para prevenir las enfermedades transmitidas por insectos, entre las cuales se encuentran el dengue, zika y chikunguya.
Por otra parte, es de gran importancia que los domicilios se encuentren protegidos con mosquiteros rígidos, ya sea de metal o plástico, en puertas y ventanas, y eventualmente colocar mosquiteros blandos (de tul o gasa) sobre las camas. También se pueden utilizar repelentes ambientales registrados ante ANMAT. Asimismo, es de destacar que bajo ninguna circunstancia los repelentes ambientales deben ser aplicados sobre personas ni animales y que deben respetarse estrictamente las instrucciones y precauciones del rótulo.
¿Cómo utilizar repelentes de insectos para uso en humanos?
Actualmente existen en el mercado diversas modalidades de repelentes para insectos, tales como sprays, lociones, cremas, geles y aerosoles. Estos productos pueden contener diferentes sustancias activas, tales como el DEET, IR3535 e icaridina. Un aspecto importante a tener en cuenta es el tiempo durante el cual el repelente resulta eficaz. Al respecto, es de suma importancia reaplicar el producto de acuerdo a las indicaciones establecidas en el rotulado por su fabricante. A su vez, es necesaria una nueva aplicación luego de exponerse al agua o haber atravesado situaciones de transpiración excesiva. También hay que tener en cuenta que, si se quiere utilizar tanto un protector solar como un repelente de mosquitos, es necesario aplicar primero el protector solar y esperar 30 minutos para luego aplicar el repelente, manteniéndose así la efectividad de ambos productos.
Uso seguro de repelentes de insectos
Los repelentes de insectos para uso en humanos son regulados por la ANMAT, debiendo cumplir con los estándares de calidad establecidos por esta Administración Nacional.
Entre dichos requerimientos, es obligatorio que el rotulado de los repelentes de insectos presente la siguiente información:
- Nombre completo, el cual puede indicar su función. En caso contrario, dicha función debe estar indicada en alguna parte del rótulo.
- Número de lote.
- Fecha de vencimiento.
- Número de legajo del elaborador o importador habilitado y número de Resolución por la cual el producto fue declarado ante la autoridad sanitaria. Por ejemplo, Res 155/98 N° de legajo XXXX (número que identifica a la empresa que elaboró o importó el producto).
- Nombre y datos de domicilio del titular, elaborador o importador del producto.
- Indicación de contenido neto.
- País de origen.
- Modo de uso, si corresponde.
La ausencia de alguno de estos datos puede revelar que el producto es ilegítimo. Por lo tanto, en ese caso sugerimos realizar la consulta a cosmeto.vigilancia@anmat.gob.ar.
Además, los repelentes de insectos para uso en humanos deben presentar en el rótulo las siguientes advertencias:
- Utilice los repelentes de forma segura;
- Lea la etiqueta y la información sobre el producto antes de usarlo;
- No aplicar repelentes sobre lastimaduras o sobre la piel irritada;
- No aplicarlo cerca de los ojos, nariz y boca o en las manos, especialmente en niños;
- No permitir que los niños apliquen este producto a sí mismos o a otros;
- Mantener el producto lejos del alcance de los niños y mascotas;
- Evitar la aplicación excesiva y reiterada y lavar diariamente la piel tratada con agua y jabón;
- En caso de intoxicaciones y/o reacciones adversas dirigirse al Centro Nacional de Intoxicaciones (tel. 0800-333-0160 o (011) 4658-7777 / 4654-6648 / 4658-3001/3020) llevando el envase o rótulo del producto;
- No manipular alimentos después de aplicarse o aplicar un repelente sin antes haberse lavado las manos;
- En caso de contacto con los ojos, lavarlos inmediatamente con abundante agua. Si los síntomas persisten a pesar del lavado, consultar con un médico;
- Para su uso en mujeres embarazadas o lactantes, consulte a su médico.
Particularmente, aquellos repelentes que se presenten bajo la forma de aerosoles y rociadores o vaporizadores también deberán consignar:
- No emplear repelentes en áreas insuficientemente ventiladas;
- No aplicar directamente en la cara: primero rociar sobre las manos y con estas distribuir el producto sobre la cara, luego lavar las manos;
- No acercar el envase al fuego;
- No rociar sobre la llama;
- Desechar convenientemente el envase vacío.
Según el ingrediente activo presente en el producto, pueden ser necesarias consideraciones adicionales. Por ejemplo, en aquellos repelentes que contienen DEET se recomienda consultar al pediatra antes de utilizarlos en menores de 2 años.
¿Qué otras medidas deben tomarse para prevenir las enfermedades transmitidas por mosquitos?
- Evitar áreas en donde haya mosquitos.
- Colocar mosquiteros rígidos, ya sea de metal o plástico, en puertas y ventanas, asegurándose de que se encuentran intactos.
- Proteger la cuna o cochecito del bebé con redecillas protectoras para mosquitos cuando permanezca en exteriores.
- Vestirse con zapatos cerrados, sombreros y ropa clara, cubriendo tanto los brazos como las piernas.
- Eliminar fuentes de agua estancada vaciando, cubriendo o volteando recipientes que pudieran contenerla.
Fuente: Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica