Hoy estamos a 30 años de la publicación de la Resolución 706/93 del ex Ministerio de Salud y Acción social, que daba inicio al Sistema nacional de Farmacovigilancia en Argentina:
“Que la Farmacovigilancia es una herramienta indispensable para el control y fiscalización de las especialidades medicinales, ya que permite la detección temprana de los efectos adversos y/o inesperados de los medicamentos en la etapa de uso extendido de los mismos, así como también facilita la percepción de fallas de respuesta terapéutica por deficiencias de calidad.
Que este sistema permite la implementación de alertas sanitarias y medidas administrativas de regulación y control”.
Art. 1º.- Créase el Sistema Nacional de Farmacovigilancia, cuyas funciones serán recoger, evaluar y organizar la información sobre los efectos adversos de los medicamentos después de su autorización y durante su comercialización.
Art. 2º.- Para el funcionamiento del sistema se constituye un Efector Central con sede en ANMAT, incorporándose efectores periféricos con experiencia en la actividad.
El Programa Provincial de Farmacovigilancia de Santa Fe es uno de los efectores periféricos pioneros en el país, ya que se consolidó apenas 2 años después de la creación del Sistema Nacional. Desde sus inicios ha funcionado de manera ininterrumpida, consolidando una importante red de profesionales de todas las disciplinas, comprometidos en la farmacovigilancia, en toda la provincia.